1.-El viernes 22 de Julio en un hermoso espacio de la Universidad Monte Avila, en Boleíta, Caracas, la Asociación Civil Mujer y Ciudadanía y la coalición Plantados en defensa de los árboles de Caracas unieron esfuerzos para sembrar un joven Samán donado por María del Carmen Miguez, miembro de la Coalición. El motivo que sirvió de estímulo fue la culminación del Diplomado: "Mujeres como agentes de cambio", que la asociación dirigida por Aixa Armas viene realizando en acuerdo con la Universidad y que ha alcanzado su octava edición.
Para todos los involucrados en la siembra de ese árbol emblemático, pero sobre todo para Lizette Fornés, quien tuvo la iniciativa y se encargó de coordinar todo el operativo, este emotivo acto permitió ratificar el compromiso de todos los allí presentes con el medio ambiente, la sostenibilidad y la diversidad en tiempos de amenaza climática.
2- Cultivar un árbol de las dimensiones de un Samán en una ciudad como Caracas puede que no sea una tarea fácil. Tampoco lo es conseguir un espacio adecuado para su siembra. Varias calles de la capital llevan el nombre de este árbol autóctono, también una urbanización. Sin embargo, el Samán es un árbol que necesita de un espacio amplio para su total desarrollo y algunos especialistas no recomiendan sembrarlo en las aceras. Esta era la preocupación principal de María del Carmen quien había cuidado y visto crecer el “samancito” en materos de diversos tamaños por espacio de unos 6 años, y dada la altura alcanzada sabía que pronto debía sembrarlo en suelo firme.
El brote de Samán que acompañaba la violeta que escogió comprar ese fin de semana en el vivero de la entrada del Country Club, no fue percibido en un primer momento por ella y, quizás, no hubiese podido identificarla de no ser por Joao el sobrino del dueño del vivero, quien recalcó su generosidad diciéndole que la violeta estaba "premiada" con un brote de Samán. Estando el vivero en una avenida que se llama El Samán, muy probablemente se trataba de un hijo de los varios majestuosos samanes que dan sombra a esa vía.
4.-Nos cuenta María del Carmen la anécdota: “Si Joao no me lo hubiera advertido, yo no lo hubiese identificado. Para ese entonces estaba germinando algunas semillas de palmeras, pero recién me iniciaba en estas labores. Este Samán ha sido el primer árbol que he cuidado desde tan pequeño. Podría decirse que es como un hijo adoptivo, dado que no germiné la semilla, pero me lo entregaron desde muy pequeño. Es tan querido como si yo misma la hubiese germinado. “
El Samán, que María del Carmen adquirió "por añadidura" tenía menos de 10 cm de altura cuando lo recibió y lo crío, lo cuidó hasta alcanzar unos 3 m al momento de ser sembrado, un viernes, el 22 de julio del 2022.